Historia de Andres «N» feminicida, serie de errores u omisiones que se repiten ….
Andrés “N” fue a declarar, y nadie lo investigó…
La impunidad que creó al feminicida de Atizapán.
Una serie de errores u omisiones se repiten una y otra vez por parte de las autoridades, así ocurrió con Andrés.
El feminicida confeso de Atizapán de Zaragoza, estuvo frente a frente con agentes del Ministerio Público en 2016.
Por la desaparición de María Noé Mares y su hijo Edgar.
La hermana, de María Noé que aún sigue desaparecida, lo llevó para declarar.
Ya que él fue la única persona que la había visto el día que no regresaron a casa ni ella ni el pequeño de siete años, pero nadie lo investigó, se fue y siguió matando.
La captura…
Bruno esposo de una de las victimas de oficio policía, acudió a las autoridades de inmediato que sólo levantaron la alerta de desaparición, nada más.
El no se quedo con los brazos cruzados, identificó la última ubicación satelital del teléfono de su esposa, marcaba cerca del domicilio de quien por 3 años, creyó era amigo de ella, a quien ayudaron por lástima.
También, ubicó en las cámaras de vigilancia que su esposa tomó el camino a ese rumbo.
Al día siguiente pidió de favor a una patrulla que lo esperara afuera del lugar donde volvió a tocar para volver a encarar a Andrés.
Quien corrió al interior del inmueble seguido de Bruno Ángel, buscó entre los múltiples objetos y halló una pequeña entrada a un sotano, donde encontró lo inconcebible, su esposa destazada.
Fue él quien descubrió al feminicida serial.
Que podría pasar a la historia como el más sanguinario con el mayor # de víctimas, de comprobarse que mató a las 29 mujeres que aparecen en su lista.
Lizeth Gallegos, hermana deRubicela, quien podría ser otra presunta víctima de Andrés, ya que su credencial de elector apareció en este inmueble.
Desapareció en 2019 en el municipio de Tlalnepantla.
Relató que su familia viajó desde Monterrey al Estado de México para denunciar la desaparición de la joven de 32 años de edad, era estudiante,trabajaba en un banco y cuidaba de su hijo de 5 años.
Cuando llegaron al ministerio público, el trato fue “muy malo”.
No nos atendieron como debió haber sido”. La hermana menor de Rubicela consideró que hubo negligencia desde el primer momento. “Nunca nos dieron el apoyo que cualquier persona merece”.
Además de la falta de sensibilidad de las autoridades, la situación se dificultó aún más para la familia que desconocía el municipio donde desapareció la joven.
En abril de este año, la mamá de Rubicela regresó Edo. Mex para pedir el expediente. Entonces “le dicen que el expediente no lo hallan. Y ya después, cuando lo hallan, ya se había mandado a archivo muerto, no le dieron procedimiento.
